Ahora que recién acabó el verano, ha refrescado, pero hace todavía buena temperatura, puede apetecer darse un remojón. Desde La Almunia del Valle os recomendamos hacer “La ruta del tranvía de Sierra Nevada” en Güejar Sierra, un pueblecito cerca de Granada.
Usaremos la pista dejada por las vías del antiguo trazado del tranvía que hace más de cuarenta años dejó de realizar su función. El tranvía fue inaugurado el 20 de marzo de 1925. Lleno de comodidades fue el pionero en España en utilizar el uso integral de electricidad para su funcionamiento.
Su precursor fue el Duque de San Pedro de Galatino, Julio Quesada, promotor del mítico Hotel Alhambra Palace en Granada. Se apostó por el creciente interés en las actividades de ocio relacionadas con la montaña y en acercar a los habitantes y turistas de Granada hasta Sierra Nevada. Un trayecto donde los viajeros disfrutaban de paisajes pintorescos increíbles.
La ruta se puede hacer tanto andando como en bicicleta de montaña y es apta para todos los públicos, debido a lo llano del terreno. Es muy agradable avanzar al lado del río Genil, escuchando su relajante murmullo, que discurre a lo largo de la ruta.
Por el trayecto el paisaje natural que surge es escarpado pudiendo disfrutar de campos de castaños que ya, en esta época del año, empiezan a amarillear. Además también se pueden ver y disfrutar de las antiguas estaciones del tranvía hoy restaurantes, donde se puede degustar comida típica guejareña.
Comenzaremos en el restaurante “La Fabriquilla” donde podremos dejar el coche. Empezaremos tomando el camino al margen izquierdo del río donde. Iremos encontrando paneles informativos del Ayuntamiento de Güéjar Sierra sobre el tranvía.
Cruzamos el primer túnel y pronto llegamos a la estación de Maitena. Estación reconvertida en el más emblemático restaurante de la zona por tener las piscinas naturales más grandes, donde nos podemos dar nuestro primer remojón.
Al seguir por la carretera llegamos a un punto donde podemos coger a la izquierda, cruzando el túnel, si vamos en bicicleta o a la derecha por un sendero que va más cerca del río si vamos caminando, por donde encontremos más pozas donde refrescarnos.
Volvemos al camino principal y en la bifurcación podremos elegir ir por la izquierda o por la derecha, donde pasaremos por el Charcón, otra estación - restaurante.
Llegamos a punto donde hay un sendero por el lado derecho del río donde se cruzan puentes colgantes, opción para los senderistas. Mejor seguir por la carretera si vamos en bicicleta, cruzando un nuevo túnel. Por ambos lados llegamos a nuestro destino, el Barranco de San Juan, última estación, donde podremos degustar su tapa de choricillo regadas con una “Alhambra”.
Desde aquí podríamos enlazar con la Vereda de la Estrella, preciosa ruta emblemática de la zona, pero eso es ya otra historia.