Paseo en plena naturaleza

La ruta del Cortijo del Barranco del Lobo es perfecta para una de esas tardes, que estando en el Hotel, queremos dar un paseo por la naturaleza y recargarnos con la luz dorada del sol de la tarde.

Duración: aproximadamente 1 hora y 45 minutos.

Distancia: 6,1 km.

Dificultad: fácil

Altitud mínima y máxima: 878m / 1083m.

Comenzamos saliendo del Hotel al Camino de La Umbría, hacia la derecha. Siguiendo el carril e indicación al Cerro Huenes (1798m), que tenemos enfrente (1).

En la siguiente intersección, seguimos por el carril del centro, ascendiendo. Y en el próximo cruce tomaremos el carril de la izquierda, entre los cortijillos. Llegaremos a una bifurcación tomaremos el camino a nuestra derecha que, ascendiendo levemente, está indicado en el poste de madera con dirección a Fuente Fría (2)

Avanzando, veremos que el camino se va convirtiendo en sendero que se bifurcará en cierto momento para desembocar en un carril que lo continuaremos recto, dejando a nuestra derecha el que baja y vuelve.El camino, fácil de seguir y algo pedregoso, nos mostrará unas estupendas vistas de los pinares de las faldas del Cerro Huenes a nuestra izquierda y de suaves colinas con campos de cultivo a la derecha (3). Atrás y al fondo vamos dejando el valle de La Umbría, el de La Solana y la silueta de sierras vecinas.

A unos 200 metros nos encontraremos con una puerta de malla metálica que traspasaremos por el lateral derecho, pues la puerta no se puede abrir, y continuaremos por el camino, de frente. El de la izquierda tiene prohibido el acceso al ser de propiedad privada.

Siempre continuando por el camino principal, dejaremos a nuestra derecha, dos veces, otros caminos y nos dirigiremos hacia un refugio de perros, pasando por su puerta. No debe preocuparnos que los animales nos ladren al notar nuestra presencia, seguimos nuestro camino sin prestarles atención. Este refugio, que no perrera, es llevado por una asociación belga que los cuida y les intenta buscar un hogar.

Sin dejar el carril principal dejaremos un camino a la derecha y luego otro a la izquierda, en suave ascenso. Cuando empecemos a descender, las mejores vistas del paseo irán abriéndose paso. Entre finales de febrero y marzo podremos disfrutar, además, de la floración del almendral de nuestra izquierda. Una vez pasada la cota más alta de la ruta, iremos llegando a las ruinas del Cortijo del Barranco del Lobo (4). Llamado así, probablemente, por la antigua existencia de lobos en la zona. En la Edad Media, había muchos lobos en Sierra Nevada. En años de mucha nieve bajaban hasta la Vega para alimentarse del ganado. Por ello, fueron eliminados indiscriminadamente. Debido a su exterminio y por la desaparición de herbívoros como ciervos, gamos, corzos debido a la deforestación del territorio, el lobo despareció de estas sierras. El último fue visto en 1933, un ejemplar solitario.

Entraremos por el lado izquierdo del cortijo, entrando en su terreno, hasta llegar al borde, donde veremos un empinado sendero de bajada (5). El Barranco de Lobo estará a nuestra izquierda, unas colmenas abajo a la derecha (recomendamos no acercarse y pasar rápido para no molestar a las abejas) y otro cortijo al que nos debemos dirigir siguiendo el camino. La pista nos llevará, rodeando la montaña, de nuevo al refugio siguiendo siempre en las dos bifurcaciones que nos encontraremos, hacia la derecha.

Y volviendo nuestros pasos, nos dirigiremos de vuelta al Hotel donde, después de un pequeño descanso y refresco podremos disfrutar de una estupenda cena con vistas al valle.